lunes, 31 de diciembre de 2012

En un lugar llamado mundo.

Así se llama el lugar donde habito,lo llaman mundo, también conocido como planeta tierra.
Aquí vivimos un par de individuos, millones, billones, trillones de individuos. Arrinconados en nuestros países con nuestras culturas, que abarcan sus propias tradiciones, su propio color de piel, sus rasgos, su forma de vestir y sus fronteras, así como también eso a lo que llamamos religión, cosas que al final lo único que nos producen son problemas y conflictos interiores.
Por aquí abajo para unos todo va demasiado bien, para otros regular y para muchos, demasiado mal. Así es nuestro estilo de vida, vivimos unos a la par de otros, cada uno sumergido en su propia vida, entusiasmados en alcanzar nuestros objetivos ; somos seres individuales, que nos desarrollamos en un núcleo de amigos y familia, sin ir más allá. 
Además, nos consideramos seres avanzados, con nuestras infraestructuras, nuestras grandes ciudades y nuestra querida "pollution" y manera de aplastar el mundo. 
He de decir, que existen distintos tipos de individuos... Unos se hacen llamar seres civilizados y los demás, son todas aquellas personas que carecen de las modernidades y del avance intelectual que la mayoría de los individuos "civilizados" consideran normal. Suelen ser ciudadanos apartados del mundo, que viven en tribus habitualmente, y en lugares más apartados de lo urbano. 
Para que logréis entender como es este mundo, hay que nombrar algo a lo que por aquí, se le llaman valores. Los famosos valores que toda persona dice tener, pero que en verdad no son más que rumores, escondidos en no se donde, que pocas veces vemos por aquí. Incluso esos a los que se le llaman seres poco civilizados, a pesar de su carencia de desarrollo intelectual, saben más de ellos, que nosotros mismos, los intelectuales.
Yo, española de 17 años, vivo en el mundo de los "intelectuales", y, a decir verdad, no es algo que me llene de orgullo. Una se va acostumbrando poco a poco, al fin y al cabo, las cosas por aquí funcionan normalmente así... Yo, por desgracia, también he adquirido este estilo de vida. Cada uno a lo suyo, con su familia, sus amigos, sus propios objetivos.... Nuestro dinero, nuestra ropa, casa, coche... Eso es lo que me inculcaron.  soy igual que ellos una más. 
hay un verbo en especial,  que en ocasiones, echo de menos : compartir. Y es que, en el país que vivo, eso de compartir no se lleva mucho.  es curioso, porque de pequeños, y sobre todo cuando tienes hermanos, siempre nos dicen eso de... " teneis que compartir", "es muy importante saber compartir", pero... Y que es de  ellos ? cuando los hemos visto a ellos compartir ? ellos que nos dan lecciones de como utilizar nuestros juguetes, y de adquirir ese valor tan importante como es compartir... cuando lo han hecho ? 
El otro día, viendo un programa de televisión en el que hacen convivir a civilizados con no civilizados, pude fijarme en la cantidad de valores que han adquirido esos a los que consideramos por aquí, menos desarrollados o menos intelectuales. Y es que, cuántos de nosotros cuando vemos una persona viviendo en la calle literalmente, nos paramos a pensar que se podría hacer por ellos ? Pues verán, aquí, los no civilizados, eso de que alguien pueda vivir en la calle mientras que otras personas pueden compartir con ellos, no lo entendieron, se quedaron pasmados. Y, de ser ellos, yo tampoco lo entendería, porque, en verdad, yo, viviendo en este lado del mundo, todavía sigo sin entenderlo. 
Vivir en este planeta tiene sus peligros, yo he pensado muchas veces en lo feliz que sería de haber nacido en una de esas tribus.
 Porque,  has de saber que por aquí nadie, o casi nadie ya que hay sus excepciones,te ayudará,  que tendrás que sacarte tu solo las castañas del fuego y que esos a los que llamamos familia, en ocasiones,te fallarán, sí, hemos llegado a esos extremos.
Hoy, por aquí abajo, en el planeta tierra, se celebra quizás la mayor fiesta del año. Empezamos un nuevo año y para eso nos vestimos con las mejores galas, hacemos la mejor comida y salimos por ahí de copas. 
Todos pedimos nuestros deseos a las 12 de la noche, deseos, que por lo general van cargados de nuevos objetivos propios o de cosas materialistas, olvidándonos como no, de los demás.
Esta noche, lo único que pido, es que no pensemos solo en nosotros y que no nos centremos solo  en nuestra propia felicidad , sino que nos paremos a pensar en lo afortunados que somos por tener lo que tenemos y en lo que debería cambiar.
Que muera un niño por segundo de hambre, mientras que hoy tendremos muchos de nosotros al menos 3 platos de comida en la mesa hace que se me quite por completo el hambre. 
Feliz Navidad, pero no a vosotros, sino a esos que en verdad no la tendrán. 



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