Lejos en la distancia.

Ya ha pasado mucho tiempo desde que tu no estás aquí, quizás demasiado... Nunca valoré  tus consejos, tus castigos ni tan siquiera tus abrazos. Lo siento... como se suele decir : " Nunca sabes lo que tienes hasta que lo pierdes". Y así es, nunca me había dado cuenta de lo mucho que necesitaba de ti, y solo empecé a hacerlo cuando noté que te podías ir lejos.

Ahora ya es demasiado tarde para cambiarlo, pero...  ¿ porque nadie me dijo que nos quedaba poco tiempo ?  

Al menos sé que todavía me quedan demasiadas cosas tuyas. Y es que hoy camino de la manera que tú me enseñaste, siempre con pasos firmes, con zancadas grandes y con fuerza, con la fuerza que me dejaste.

Gracias por salvarme del abismo y de la tristeza.Gracias por cada bronca,cada abrazo,cada uno de los besos de buenas noches y por cada una de las veces que me tapaste.Gracias por regalarme la vida que ahora tengo y gracias por ser una pieza clave en mi puzzle.

He de decir que : no hay ni un solo minuto en que no estes en mi corazón, y ni un solo día en que tu recuerdo no pase por mi mente.
Hoy puedo estar tranquila, sé que tu mano acaricia mi corazón muda y tremuda ; y sé que tus pasos, invisibles para mí, acompañan a los mios codo contra codo, mano a mano.

Que nos equivocamos...

cada vez que tiramos la toalla, que decimos que no podemos, que no vale la pena seguir adelante... que damos un examen por suspenso, un dia por malo, un amor por perdido, una promesa por rota o una cadena por perpetua.

Yo nunca doy nada por perdido... Si de verdad quiero ese algo,  lucho por ello con todas mis fuerzas, incluso hasta el punto de hacerme daño; nunca me  importó demasiado... Sé que al final la vida me lo recompensará, que alcanzaré eso que tanto que deseaba... Y que entonces todas las heridas desaparecerán.